No imagino el dolor de Magdalena al ver a su amante lacerado herido, ante una multitud inerme impotente ante la barbarie. No imagino el dolor de María amorosa madre, dolorosa ante el suplicio de Jesús y la incertidumbre sobre si vivirá. No imagino el dolor de José trabajador humilde y padre carpintero sin recursos para… Sigue leyendo No imagino el dolor